quarta-feira, 3 de fevereiro de 2021

3 Poemas ao Camarada Lênin * Bertolt Brecht / Alemanha

 Tres Poemas  al Camarada LENIN


Cantata por el aniversario de la muerte de Lenin


Al morir Lenin,

un soldado de la guardia, según se cuenta,

dijo a sus camaradas: Yo no quería

creerlo. Fui donde él estaba

y le grité al oído: “Ilich,

ahí vienen los explotadores”. No se movió.

Ahora estoy seguro de que ha muerto.


Si un hombre bueno quiere irse,

¿con qué se le puede detener?

Dile para qué es útil.

Eso lo puede detener.


¿Qué podía detener a Lenin?


El soldado pensó:

si oye que los explotadores vienen,

puede que estando sólo enfermo se levante.

Quizás venga con muletas.

Quizás haga que lo traigan

pero se levantará y vendrá

para luchar contra los explotadores.


El soldado sabía que Lenin

había peleado toda su vida

contra los explotadores.


Cuando terminaron de tomar por asalto

el Palacio de Invierno, el soldado

quiso regresar a su hogar, porque allí

se habían repartido ya las tierras de los propietarios.

Entonces Lenin le dijo: quédate,

todavía hay explotadores,

y mientras haya explotación

hay que luchar contra ella.

Mientras tú existas,

tienes que luchar contra ella.


Los débiles no luchan. 

Los más fuertes quizás luchan una hora.

Los que aún son más fuertes, luchan unos años.

Pero los más fuertes de todos luchan toda su vida.

Éstos son los indispensables.



Elogio del revolucionario


Cuando la opresión aumenta,

otros se desaniman,

pero su valor crece.

Él organiza la lucha

por un centavo de sueldo, por el agua de té,

por el poder del Estado.

Le pregunta a la propiedad:

¿De dónde surgiste?

Le pregunta a las opiniones:

¿A quién sirven ustedes?

Donde siempre callan todos,

allí hablará él.

Y donde reina la opinión y se habla del destino,

él dará los nombres.

Donde él se sienta a la mesa,

se está sentando la inconformidad a la mesa.

La comida se echa a perder

y en seguida se ve lo estrecho que es el cuarto.

A donde le echen,

allí irá la insurrección;

y en el sitio

de donde lo expulsen

seguirá reinando la intranquilidad.


Por la época en que Lenin murió y faltó

se había obtenido la victoria, pero el país estaba destruido.

Las masas habían despertado,

pero el camino estaba oscuro.

Al morir Lenin,

los soldados se sentaron sobre las piedras del camino y lloraron

y los obreros abandonaron las máquinas

y agitaron los puños.


Al irse Lenin, fue

como si el árbol le dijera a las hojas:

Me marcho.


Desde entonces han pasado quince años.

Una sexta parte de la tierra

está liberada de la explotación.

Cuando se grita: “Ahí vienen los explotadores”,

las masas siempre se yerguen de nuevo,

dispuestas a luchar.


Lenin está inscrito

en el gran corazón de la clase obrera.

Él fue nuestro maestro.

Él luchó con nosotros.

Él está inscrito

en el gran corazón de la clase obrera. 

...


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